El título del artículo se titula: ¿Cerrar, vender, esperar a Milei? La icónica fábrica del interior que aguarda las señales del nuevo Gobierno.
La nota fue publicada en la versión digital el pasado 30 de noviembre y en la misma una fuente cercana a los accionistas Esteban Eskenazi y Matías Carballo, expresan que “No hay decisión de cierre; los sueldos están al día”.
Además, en el escrito se menciona que entre los inversores de Vassalli también estuvo hasta 2021, Guillermo Ferraro. Y Ferraro será el ministro de Infraestructura de Milei.
Sobre las versiones de cierre, la fuente que habló con La Nación explica eso se debió al freno en la producción.
Según explicaron a La Nación, fue porque continuar con ello era “a pérdida”. Pusieron un ejemplo: por la suba de los costos, hacer una máquina quedaba con una ecuación de un 32% más cara que un equipo extranjero.
Según indicaron, que vuelva a “recomponerse” la relación entre el dólar y la inflación para que la compañía retorne a terreno competitivo.
“Con una economía más racional esta empresa puede ser una oportunidad”, explicaron. Remarcaron que tiene suficiente tecnología como para ser competitiva. Según trascendió, hubo interesados en la compañía, uno del exterior y dos nacionales, pero en esto no hubo definiciones.
Por lo pronto, la firma sigue con sus puertas abiertas, si bien disminuida en su actividad, descarta el cierre y aguarda por las señales económicas que puedan venir con el nuevo gobierno. Una administración que, si el clima acompaña, tendrá una buena cosecha del campo que se traducirá en mejores ventas de maquinaria agrícola como las cosechadoras de esta icónica fábrica del interior. Una empresa que ya produjo en su historia unas 45.000 máquinas